Unas pruebas de motor proactivas protegen la planta de etanol

El etanol es un combustible limpio utilizado en Estados Unidos desde la década de 1850. El automóvil Modelo T de Ford se diseñó para funcionar con etanol y, aunque éste se prohibió durante la época de la Ley Seca, ganó adeptos en los años setenta, en una época de altos precios de la gasolina y preocupación por las importaciones de petróleo. El etanol resurgió con fuerza cuando el Congreso puso en marcha en 2005 la Norma de Combustibles Renovables para establecer unos requisitos mínimos de uso de combustibles renovables, y ahora se añaden unos 14.000 millones de galones de etanol al año a la gasolina que se consume en todo el país.

 

La empresa

Una de las empresas dedicadas a contribuir a las fuentes de energía renovable de Estados Unidos es Cardinal Ethanol. En 2008, Cardinal Ethanol puso en marcha una planta de producción de etanol alimentada con gas natural en el corazón del Cinturón del Maíz. Situada en Indiana, esta planta de etanol produce aproximadamente 100 millones de galones de etanol al año, además de 340.000 toneladas de granos secos de destilería con solubles que se distribuyen a empresas productoras de alimentos para ganado y aves de corral.

 

La aplicación

Para producir 100 millones de galones de etanol al año, la planta tiene que garantizar que sus equipos funcionen de forma fiable 24 horas al día, 7 días a la semana. El equipo de mantenimiento interno de la planta de etanol programa “paradas planificadas” dos veces al año, una en primavera y otra en otoño, para realizar el mantenimiento de los equipos y la maquinaria que funcionan en la planta. Durante la parada de otoño de 2015, se instalaron cuatro motores nuevos para accionar las cintas transportadoras que introducían el maíz en la planta de procesamiento de etanol.

En diciembre de 2015, el equipo de mantenimiento observó que el flujo de grano se interrumpía. Mark Durr, director de proyectos de mantenimiento de la planta de etanol, investigó rápidamente el sistema de entrega de grano y determinó que las interrupciones del flujo de grano se debían al cierre intermitente de los transportadores. A continuación, Mark dio instrucciones a su equipo interno de mantenimiento para que realizara varias pruebas en los cuatro motores que accionan las cintas transportadoras de maíz.

“Di instrucciones a mis técnicos para que probaran los cuatro motores, que tenían entre 40 y 60 caballos, y nuestro megóhmetro mostró que las bobinas estaban bien, sin vueltas cortas y sin nada que fuera a tierra”, explica Mark. “Cuando utilizamos el ALL-TEST PRO 33 IND™, ese instrumento de comprobación de motores nos mostró que los rotores estaban mal”.

 

Resultados de las pruebas

Mark se puso inmediatamente en contacto con el contratista general que había instalado los motores para informarle de su descubrimiento. El contratista tenía curiosidad por la conclusión de Mark de que había un problema con los rotores. Los motores eran nuevos y el contratista no podía creer que los cuatro motores tuvieran problemas con los rotores. Cuando se le preguntó cómo había llegado a la conclusión de que los rotores eran la causa del problema, Mark explicó al contratista que tenía un AT33™, un instrumento de comprobación de motores sin corriente que muestra el estado completo de los bobinados del estator y del rotor.

“Compré el instrumento de comprobación de motores AT33™ hace algo más de un año, poco después de empezar a trabajar en esta planta. Nos centramos en el mantenimiento preventivo para mantener esta planta en funcionamiento, y eso significa disponer de las herramientas adecuadas para evitar paradas de la planta”, afirma Mark. “Cuando tienes un problema con un motor, un megóhmetro, un multímetro y un medidor LCR (L-inductancia, C-capacitancia, R-resistencia) no te van a decir si hay un problema con un rotor, pero un AT33™ sí”.

Tras comunicar al contratista los resultados de las pruebas de los motores, éste se encargó de sustituir los motores, que estaban en garantía. Los motores que habían sido probados con el AT33™ fueron enviados al centro de servicio del contratista para ser desmontados e inspeccionados. Los técnicos del centro de servicio confirmaron que, efectivamente, los rotores habían sido la causa principal de que los motores no funcionaran como estaba previsto.

“El informe del centro de servicio, que confirmaba que los rotores estaban mal, no fue una sorpresa para mí”, explica Mark. “Hemos utilizado el AT33™ con bastante éxito en varios motores, porque sabemos que los comprobadores más comunes no tienen la capacidad de mostrar la salud del rotor. Esta es una de las principales razones por las que compré el AT33™, por su capacidad para comprobar el rotor. En este caso, me resultó realmente útil”.

 

Conclusión

Los motores deben probarse antes de la instalación

Es fundamental inspeccionar los motores nuevos y los motores almacenados antes de instalarlos en un sistema. Dedicar unos minutos a probar un motor antes de instalarlo puede ahorrar miles de dólares en mantenimiento y, en algunos casos, en costes de parada.

El instrumento de comprobación de motores sin tensión AT33™, que realiza pruebas estáticas y dinámicas, es un activo probado para revelar el estado completo del rotor del motor y los devanados del estator, y también ayuda al técnico de mantenimiento o al operador a comprender si hay algún problema de contaminación, conexiones y fallos a tierra.

 

Acerca de ALL-TEST Pro, LLC

ALL-TEST Pro cumple la promesa de un verdadero mantenimiento del motor y solución de problemas, con innovadoras herramientas de diagnóstico, software y soporte que le permiten mantener su negocio en funcionamiento.

 

Acerca de Cardinal Ethanol

Fundado originalmente por 12 miembros del condado de Randolph (Indiana), el proyecto Cardinal Ethanol se organizó oficialmente en febrero de 2005 con la intención de planificar, construir y explotar una planta de procesamiento de maíz en seco de 100 millones de galones para beneficiar a los inversores, los agricultores y la comunidad.